Llegue a casa y me encontré 4 perritas. Cuando me
fui dejé 2, Princesa y Sophie. Ahora además están, Gris y Persi. No debe ser
sorpresa, sabiendo que Junior está estudiando veterinaria y ya quiere convertir
la casa en una perrera :P
Persi es una Yorki súper cariñosa que te hace
gracia desde que llegas a la casa. Algo que la caracteriza de las demás, que
son chiguaguas, que siempre están ladrando. Esta pequeña te enamora desde que
la ves por primera vez y le tomas más cariño cuando percibes su limitación física.
Tiene las 2 patas delanteras fracturadas, solo camina con las 2 patas traseras.
Si te haces una imagen, es como si utilizaras tus codos para apoyarte y poder
caminar. ¡Es impresionante!
Y cuando conoces la causa, te entristece y te
hace pensar mucho. Donde su primer dueño, se cayó de un segundo piso y el veterinario
que la atendió le puso mal el yeso, y el hueso no se arregló como debía. Luego la
llevaron donde otro veterinario (así fue que Junior la conoció) quien les dijo
que había que operar y ellos decidieron que saldría muy caro y que lo mejor era
que la durmieran. Este veterinario prefirió dejarla con vida. Junior la veía todos
los días en la veterinaria y convenció a mami de traerla a casa.
Todo el que la ve caminar se entristece y hasta
llora, pero al mismo tiempo se da cuenta que esta perrita ha sido muy fuerte,
ha logrado caminar a pesar de sus limitaciones físicas y es ejemplo de persistencia
sin importar lo que le haya pasado. Por eso se llama Persi.
¡Que enseñanza
más grande… hasta de los perritos aprendemos aquí! J
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