jueves, 18 de abril de 2013

Pago por bendición


El continente Europeo está repleto de iglesias, hermosos monumentos que sobrepasan las expectativas de cualquier espectador. Yo me impresionaba con la Catedral Primada de América, la catedral de Santo Domingo, pero al llegar aquí me he dado cuenta que cualquier iglesita de un barrio X de Barcelona es más grande o impetuosa que esa.

Recuerdo que hablé sobre esto en uno de mis primeros blogs. Si quieres puedes leerlo: Primer domingo

Lo que quiero comentar en esta ocasión, es un tema que me viene impactando desde hace meses. Dependiendo de la ciudad de Europa que visites te cobran entrada para visitar las iglesias, aclaro, no para ir a misa o al Santísimo a orar, sino para entrar a verlas.

El año pasado tuve la oportunidad de viajar a Italia y es increíble que no te cobren para entrar a la Basílica de San Pedro (El Vaticano) o a la Basílica de Santa Maria la Mayor (Roma), la Catedral de Milano o la de Florencia pero si te cobren para la Basílica de San Lorenzo (Florencia), Catedral de Barcelona y la Basílica de la Sagrada Familia por  mencionar algunas.

Entiendo que hay mucho flujo de turistas y que el hecho de permitir la entrada puede deteriorar más rápido la infraestructura pero no se debe obligar al pago de un precio. Hay algunas que te cobran 2, 6, 8 y hasta 14eurs de entrada.

Hasta he llegado a pensar que como las iglesias en Europa tienen tan pocos fieles es la forma más segura de recaudar el dinero que no se obtiene en las ofrendas.

Sé que justifican las remodelaciones, mantenimiento y demás  obras con este pago de los visitantes, como es el caso de la Basílica de la Sagrada Familia, que gracias al cobro de entrada y venta de artículos podrán terminar este gran proyecto.  Pero de todas formas me inquieta esta situación.

¿Quién controla eso? ¿Está permitido realmente?

Yo pondría una urna en la entrada indicando ofrenda voluntaria y un mensajito como este: “Con tu aporte nos ayudas a mantener este Templo como Dios se merece

Creo que tendría mejor efecto ante todos y no limitaría a aquellos que no cuentan con el dinero para entrar.

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